¿Qué nos depara el futuro? Sobre este tema hay una gran diferencia entre lo que la Biblia dice y lo que el mundo cree. La gente prefiere pensar que los problemas se resolverán un día u otro, y que el mundo se convertirá en un lugar mejor. Pero la Biblia no anuncia ninguna mejoría en un futuro próximo; peor aún, nos advierte que la injusticia y la maldad superarán todo lo que hemos visto hasta ahora (Mateo 24:12).
¿Qué actitud debemos adoptar? ¿Confiar en los medios de comunicación, que prometen un futuro mejor, o confiar en lo que la Palabra de Dios nos dice? Los que la creen esperan un acontecimiento extraordinario que transformará sus vidas: “El Señor mismo… descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán… Luego nosotros… seremos arrebatados juntamente con ellos… y así estaremos siempre con el Señor” (1 Tesalonicenses 4:16-17).
¿Y los demás? Las cosas irán de mal en peor, debido a la maldad de los hombres (2 Timoteo 3:1, 13), hasta llegar a estos días de angustia, en medio de un mundo cada vez más injusto, sin puntos de referencia, violento y que sufre.
¿Es una perspectiva desesperada? No, Dios es paciente, y no quiere “que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento” (2 Pedro 3:9). Aún hoy la Palabra nos habla de perdón, de paz, de vida eterna y felicidad. Para beneficiarnos de ellos debemos creer en Jesús, el Salvador.