La Buena Semilla: Jueves 15 Enero
Jueves
15
Enero
Levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, (Jesús) salió y se fue a un lugar desierto, y allí oraba.
Marcos 1:35
Oh Señor, de mañana oirás mi voz; de mañana me presentaré delante de ti, y esperaré.
Salmo 5:3
Empezar bien el día

Mientras leemos los evangelios, ¡echemos un vistazo a los ajetreados días de Jesús! A veces, había tanta gente que lo rodeaba que resultaba difícil acercarse a él. Pero el versículo de hoy nos muestra que comenzaba sus días a solas y en oración. Antes de elegir a sus apóstoles, incluso pasó una noche entera en oración (Lucas 6:12).

El rey David escribió: “Oh Señor, de mañana oirás mi voz”. Nada más levantarse, se dirigió al Señor para que le hablara. Se dirigió a Dios, no al hombre. David continuó: “de mañana me presentaré delante de ti, y esperaré”. Al comienzo de su jornada, se preparó diligentemente mediante la oración, y luego esperó con una actitud de fe.

¿Cómo empezamos el día? ¿Tomando las cosas como vienen, sin habernos preparado para ellas, sin haber hablado con Dios sobre ellas?

No, hablemos primero a Dios a través de la oración. Expliquémosle nuestras necesidades y expongámosle las decisiones que debamos tomar. Entonces, como David, podremos esperar con fe y afrontar el día bien armados, confiados en el cuidado del Señor.

Al principio de mi vida profesional, frente a mi oficina había un negocio muy concurrido que se dedicaba a la entrega de piezas de recambio. En la entrada se podía leer este lema: «El 95% del éxito depende de la preparación». Me apropié este lema durante mis años de trabajo, pero también considero que es importante en la vida de fe. Comencemos cada día con un momento con el Señor, escuchando su Palabra y orándole.