La Buena Semilla: Miércoles 25 Marzo
Miércoles
25
Marzo
Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos. Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
Romanos 5:6, 8
Dios le ama

¿Podemos pensar en Dios sin sentir algún temor? Es normal respetar a nuestro Creador y obedecerle. La Biblia incluso dice que Dios espera de nosotros que le amemos con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma y con todas nuestras fuerzas (Deuteronomio 6:5).

Pero nadie pudo responder a lo que él pedía, ni siquiera mediante las más elementales muestras de agradecimiento que Dios podía esperar de sus criaturas. Por el contrario, es claro que todos le desobedecimos, por eso nos dice que somos pecadores. Nuestra relación con Dios está rota porque nuestra desobediencia pone un obstáculo entre él y nosotros. Después de la muerte “cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí” (Romanos 14:12). ¡Es terrible!

¿Cómo, pues, podemos encontrarnos con Dios sin ser condenados? ¿Quién puede intervenir? ¿Cómo puede ser perdonada mi desobediencia?

La Biblia dice que aún hoy Dios ofrece su gracia a los que le han dado la espalda. Lo hace porque Jesucristo, su amado Hijo unigénito, en quien halló su complacencia, aceptó ser condenado en lugar de los humanos rebeldes contra él (Romanos 3:21-26). Sí, el amor de Dios tiene esta medida. Aceptó el sacrificio de su amado Hijo para poder perdonar a las mismas personas que lo crucificaron. Y aún más, adopta y considera como sus hijos a todos los que aceptan esta gracia divina.

“Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios” (1 Juan 3:1).

Éxodo 37 – Hechos 26:1-18 – Salmo 36:7-12 – Proverbios 12:7-8