La Buena Semilla: Jueves 12 Noviembre
Jueves
12
Noviembre
Jesús, mirándole, le amó, y le dijo: Una cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.
Marcos 10:21
¿Qué debo hacer?

El evangelista Marcos nos habla de un hombre rico que admiraba a Jesús. Aparentemente este hombre tenía todo. Sin embargo, comprendió que nada de lo que poseía añadiría un segundo a su vida. Llegaría el día cuando tendría que dejarlo todo. Como conocía los textos de la ley, también sabía, sin duda, que un día tendría que rendir cuentas a su Creador…

Jesús se interesó por este hombre que vino a él y le preguntó qué debía hacer para heredar la vida eterna, de la cual había oído hablar a Jesús: la vida eterna consiste en conocer a Jesucristo, a quien el Padre envió (Juan 17:3). Y la mejor manera de conocerle, ¿no es siguiéndole? Entonces, de cierto modo y con amabilidad, Jesús le dijo: Demuestra que amas más la verdad que a tus posesiones materiales (repartiéndolas entre los pobres) y sígueme (sigue mis pasos, poniendo en práctica mis enseñanzas).

Pero cuando para un hombre el bien más preciado es su dinero, ¿qué lugar queda para Dios? Jesús podía ser un “Maestro bueno”, pero este joven no se interesó más en él y se fue triste…

Tal vez usted no sea joven y rico, pero también necesita conocer la verdadera vida, y Dios se la ofrece hoy. Confíe en él, sin esperar nada a cambio. El principio de «dar y recibir» no puede conducir a nadie a Dios. Él ofrece gratuitamente la vida eterna a todo el que crea que Jesús murió para expiar sus pecados.

Entonces estamos felices de seguirle.

“Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida” (Juan 8:12).