El Señor está cerca: Martes 22 Diciembre
Martes
22
Diciembre
Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos.
Mateo 5:11-12
Haceos tesoros en el cielo.
Mateo 6:20
Grande será vuestra recompensa

¿Se ha preguntado qué recompensas le esperan en el cielo? La Biblia nos enseña claramente los criterios que Dios utilizará para determinar quién recibirá estas recompensas y qué conducta las merecerá. Cuando comparezcamos ante el tribunal de Cristo, seremos juzgados según la luz que hayamos recibido –es decir, la verdad que Dios nos ha confiado– y lo que hemos hecho con las oportunidades que él nos ha dado.

El Señor Jesús nos ha prometido recompensas por ciertas acciones y actitudes en específico. El Evangelio según Mateo dice que quienes sufren insultos y persecución por su causa tienen una gran recompensa reservada en los cielos (véase Mt. 5:11-12). También nos enseña que Dios reconocerá y recompensará todos los actos de bondad realizados por sus seguidores (véase Mt. 25:40). Es más, hasta el gesto más sencillo, como dar un vaso de agua a un discípulo sediento, será recordado en el día de las recompensas (véase Mt. 10:42).

Entre los que recibirán recompensas estarán aquellos que, respondiendo a Su llamado, han dejado familia y posesiones por causa del Evangelio (véase He. 10:34, 35). También valorará de manera especial las muestras de amor hacia nuestros enemigos –por esta actitud seremos recompensados grandemente y llamados “hijos del Altísimo” (véase Lc. 6:35).

Aunque a veces veamos que otros prosperan y recogen una abundante cosecha sin reconocer cómo hemos preparado el terreno para la siembra, podemos estar seguros de que Dios no pasa por alto ningún esfuerzo: tanto el que planta como el que riega recibirán su recompensa (véase 1 Co. 3:8). El Señor observa cada detalle, y todo lo que se haga por su causa será recompensado.

Tim Hadley, Sr.