Un joven hermano en Cristo preguntó: «¿Cómo puedo saber cuándo el Espíritu Santo me está guiando a orar, indicar un himno o leer un pasaje de las Escrituras en una reunión?». El pasaje de hoy nos ayuda a responder esta pregunta al revelar cinco aspectos sobre el Señor:

1. Entró en la sinagoga conforme a su costumbre. Evidentemente, había desarrollado el buen hábito de asistir con regularidad. Si queremos ser guiados por el Espíritu en las reuniones, debemos estar presentes regularmente. No basta con decir: «Estaré allí en espíritu». ¡Dios utiliza personas, no espíritus!

2. Se levantó a leer. Esto demuestra intención y propósito de corazón. Debemos preguntarnos: «¿Deseo realmente participar y no ser solo un espectador en el servicio de Dios? ¿He venido con la disposición de ser usado por el Señor según su voluntad? ¿Estoy disponible?»

3. Le entregaron el libro de Isaías. El Señor no dijo: «Prefiero leer un pasaje de Malaquías», sino que se adaptó al orden de la reunión.

4. Halló el pasaje. No cerró los ojos ni abrió el libro al azar para leer lo primero que encontrara. Su participación se basó en un conocimiento profundo de la Palabra de Dios y su aplicación a la situación del momento.

5. Se sentó. Algunos nunca hemos aprendido a levantarnos, mientras que otros nunca hemos aprendido a sentarnos. Necesitamos aprender ambas cosas.