-Soy joven, ¿por qué debería pensar en el más allá?
–“No te jactes del día de mañana; porque no sabes qué dará de sí el día” (Proverbios 27:1).
-Soy honesto, ¿por qué Dios ha de condenarme?
–“No hay justo, ni aun uno; no hay quien entienda, no hay quien busque a Dios” (Romanos 3:10-11).
-Mi conciencia no me acusa de nada.
–“Aunque de nada tengo mala conciencia, no por eso soy justificado; pero el que me juzga es el Señor” (1 Corintios 4:4).
-¿Puede Jesús recibir a alguien tan miserable como yo?
–“Al que a mí viene, no le echo fuera” (Juan 6:37).
-¿Qué hay que hacer para tener la vida eterna?
–“Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna” (1 Juan 5:13).
-¿Qué debo hacer para ser salvo?
–“Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo” (Hechos 16:31).
-¿Perderé mucho si me vuelvo cristiano?
–“Cualquiera que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna” (Mateo 19:29).
-¡Es demasiado bonito para que sea cierto!
–“Dios… no miente” (Tito 1:2).
Génesis 21 – Mateo 12:1-37 – Salmo 10:12-18 – Proverbios 3:21-26