«Esta es mi verdad», o: «A cada uno su verdad», solemos decir. Pero, una verdad que solo es verdad para mí, ¿puede llamarse realmente una verdad?
¿Nuestra relación con la verdad se ha oscurecido? O quizás pensemos que la verdad es inaccesible, como Pilato, quien respondió a Jesús: “¿Qué es la verdad?” (Juan 18:38), y no esperó la respuesta. Sin embargo, la verdad está al alcance de todos. Podemos hallarla en la Biblia. “Tu palabra es verdad” (Juan 17:17), dijo Jesús hablando con Dios. Tal vez nos hacemos ilusiones sobre lo que somos. La Biblia nos dice que todos los seres humanos desobedecen la voluntad de Dios y necesitan su perdón. Quizá tengamos ideas erradas acerca de Dios, y pensemos que él es un Dios bueno, que perdona todo sin pedir nada. O a lo mejor creamos que Dios está lejos, que es inaccesible.
La Biblia nos revela la verdad: Dios es justo y salvador. Él nos invita a ir a él para recibir el perdón ofrecido gratuitamente a todo el que cree en él. Dios “quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad” (1 Timoteo 2:4). Verdad respecto a lo que soy… pero más aún, verdad respecto a Su Hijo, “Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos” (v. 5-6). Dios nos ha dado entendimiento para conocer a Jesús y su obra salvadora.
“Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero” (1 Timoteo 1:15).
Números 6 – 1 Timoteo 6 – Salmo 74:12-23 – Proverbios 18:1