“Poseemos dos revelaciones, la Creación y las Escrituras, ambas son superiores al hombre. Desde hace sesenta años estudio con admiración el magnífico libro de la Creación, y este amplio estudio no ha hecho más que fortalecer mi certeza de que estas dos fuentes de testimonio están en pleno acuerdo. Muchas personas dispuestas a creer son confundidas por la repetida afirmación de que el relato bíblico de la Creación (en las primeras páginas de la Biblia) es contrario a la ciencia. Como hombre de ciencia y como cristiano, afirmo lo contrario. En efecto, tengo la certeza reflexiva de que la Biblia no está en contradicción con la verdadera ciencia, la de los hechos que podemos observar. Más bien, las teorías que no hacemos más que imaginar (son las que están en oposición con la Biblia).”Si recibimos el testimonio de los hombres, mayor es el testimonio de Dios“(1 Juan 5:9).”Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios“(Hebreos 11:3).
Aunque los términos empleados en el texto sagrado a veces sean muy simples y comprensibles para todos, han sido manifiestamente escogidos de tal manera que adquieren un verdadero valor científico para un naturalista atento. Esta elección muestra una ciencia tan exacta de la naturaleza de las cosas y de los seres, que revela al verdadero autor de estos relatos: es el mismo autor de la Creación”.
Génesis 19 – Mateo 10:26-42 – Salmo 9:15-20 – Proverbios 3:16-18