La Buena Semilla: Viernes 4 Abril
Viernes
4
Abril
Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.
1 Juan 1:9
(Jesús dijo:) Yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás (mis ovejas), ni nadie las arrebatará de mi mano.
Juan 10:28
¿Dios puede perdonar todo?

Tal vez un cristiano que haya cometido un error muy grave se pregunte si Dios puede perdonarlo. Veamos el caso del rey David (2 Samuel 11). ¿Qué hizo?

Se quedó descansando en lugar de ir a la guerra con su ejército. Vio a una mujer, la deseó y cometió adulterio con ella.

Luego hizo matar a Urías, el marido de Betsabé, para ocultar su pecado. Más tarde David declararía: el hombre que hizo tal cosa “es digno de muerte”.

Sin embargo, cuando Dios le descubrió sus pecados, David los confesó (2 Samuel 12:13), y Dios le prometió que no moriría. ¡Es indispensable confesar sincera y profundamente nuestra maldad! El Salmo 51 nos muestra el trabajo de conciencia por el que David pasó: reconoció la magnitud de su pecado, de la ofensa hecha a Dios, y se volvió a él.

“Si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo” (1 Juan 2:1). Cuando pecamos, Jesús nuestro abogado se ocupa de hacernos volver a Dios. Dios es justo cuando perdona a los que confiesan sus pecados: él es “justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús” (Romanos 3:26). Dios perdona, no por nuestras obras o conducta, sino gracias a la obra de Cristo. Jesús sufrió y murió en la cruz para que este perdón sea posible.

Sin embargo, la maravillosa seguridad de que Dios perdona no nos autoriza a tomar el pecado a la ligera. ¡Nuestro Salvador pagó un precio muy alto por ello! ¡Pidámosle que nos dé la fuerza para vivir agradándole en todo!

Ezequiel 28 – Gálatas 5 – Salmo 39:1-6 – Proverbios 12:27-28