La Buena Semilla: Jueves 25 Diciembre
Jueves
25
Diciembre
Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
Isaías 9:6
Os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor.
Lucas 2:11
Navidad

Se supone que la Navidad recuerda el nacimiento de Jesucristo, cuya fecha se desconoce. La Navidad comenzó a celebrarse el 25 de diciembre en Roma, hacia el año 330. Se trataba de remplazar las fiestas paganas del solsticio de invierno: en el imperio Romano se celebraba el «renacimiento» del sol cuando los días empezaban a crecer. Hablando de la venida de Jesús, Lucas dice que “nos visitó desde lo alto la aurora”. De ahí la asociación de esta fiesta del sol con el nacimiento de Jesús, quien vino a iluminar nuestra noche.

Ciertamente, Jesús es la luz del mundo (Juan 8:12). Él mismo lo dice. Pero la fiesta de Navidad establecida por los hombres no tiene este carácter, no se menciona en la Palabra de Dios. Para muchos cristianos la Navidad sigue siendo una ocasión especial para celebrar el nacimiento de Jesús el Salvador. Sin embargo, quienes lo reconocen como Señor y creen que murió y resucitó, pueden recordarlo a él y a estos maravillosos acontecimientos durante todo el año. Esto los llena de gozo y gratitud, y los anima a alabarlo constantemente. Recuerdan sin cesar este hecho único: Dios vino a este mundo. Tomó la forma de un niño. Su venida al mundo fue anunciada con 700 años de antelación: “He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros” (Mateo 1:23; Isaías 7:14).

Zacarías 9-10 – Apocalipsis 18 – Salmo 147:1-6 – Proverbios 30:24-28