¿Cómo ignorar el aumento generalizado de la violencia, la corrupción, y paralelamente la decadencia moral de la sociedad? ¿Estamos desconcertados e intranquilos? A las preguntas que nos hacemos sobre el aumento del mal, la Biblia responde en el versículo citado en el encabezamiento. ¿Hemos llegado a los tiempos difíciles de los últimos días? ¿Quién no se da cuenta de esta degradación? ¿Por qué nuestra sociedad no reacciona? La Palabra de Dios también responde: “El dios de este siglo (Satanás) cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios” (2 Corintios 4:4).
Cristianos, a veces estamos como sumergidos por el incremento de la perversidad y la maldad. ¡No nos desanimemos! Nuestra esperanza está en Jesús, nuestro Salvador resucitado. Tenemos la responsabilidad de ser testigos de Cristo, pero podemos vivir en paz si miramos hacia él, quien pronto vendrá a llevarnos al cielo. El mundo va mal, y peor aún, se encamina hacia el juicio de Dios. Pero los creyentes saben que Jesús los libró y los sacará de la tierra para llevarlos junto a él, a la casa del Padre, para siempre.
Lector, no queremos asustarlo, sino más bien decirle que Dios, quien condena el mal, ama al pecador. También preparó una salida para todo el que cree en Jesús. No deje pasar la oportunidad de tomar este salvavidas que Dios le ofrece gratuitamente.
Levítico 27 – Efesios 6 – Salmo 72:1-11 – Proverbios 17:17-18