La Buena Semilla: Jueves 13 Julio
Jueves
13
Julio
¿Qué haremos? Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.
Hechos 2:37-38
El bautismo (2)
Leer Hechos 2:22-39

Las personas a las que el apóstol Pedro invitó a bautizarse habían pedido a los soldados romanos que clavaran a Jesús en una cruz. Se turbaron cuando se dieron cuenta de lo que habían hecho. Entonces Pedro les dijo: “Arrepentíos”, es decir, reconozcan su pecado, renuncien a él, y “bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados”.

Sin embargo, esto no significa que el perdón se nos conceda a través del bautismo. De hecho, varios versículos del Nuevo Testamento dejan claro que la salvación se obtiene mediante la fe en el Señor Jesús (Juan 1:12; 3:16; Hechos 16:31; Romanos 10:9).

En estos versículos vemos claramente que esta certeza es la base de la fe cristiana. Nuestros pecados no solo son perdonados, sino también lavados (Hechos 22:16). Creamos siempre que Dios nos ha perdonado y limpiado mediante la muerte de Jesús en la cruz. Confiemos en que Dios es un Dios de gracia.

En Hechos capítulo 2, los que se bautizaron mostraron, con este hecho, que se separaban públicamente de los que habían crucificado a Jesús, y que a partir de ese momento estaban de su lado.

Esto es verdad también actualmente: al ser bautizados, nos ponemos públicamente bajo la autoridad de Jesús, nuestro Salvador y Señor.

El bautismo bíblico es la señal de nuestra muerte con Cristo (Romanos 6:3-4), de nuestra resurrección con él (Colosenses 2:12-13).

(continuará el próximo jueves)

Miqueas 1-2 – Lucas 4:1-15 – Salmo 83:1-8 – Proverbios 19:11-12