La Buena Semilla: Miércoles 31 Mayo
Miércoles
31
Mayo
Así ha dicho el Señor: Vosotros me habéis dejado, y yo también os he dejado… Y los príncipes… y el rey se humillaron, y dijeron: Justo es el Señor. Y cuando el Señor vio que se habían humillado… (dijo): Se han humillado; no los destruiré; antes los salvaré en breve.
2 Crónicas 12:5-7
Salvados bajo las bombas

Una vez más una joven estudiante alemana había oído el Evangelio, pero había permanecido indiferente. Ella quería vivir su vida y lo estaba haciendo, hasta el terrible día del gran bombardeo de Hamburgo, Alemania, durante la segunda guerra mundial. En pocas horas, en julio de 1943, la ciudad se convirtió en una hoguera.

En su huida halló refugio con otras personas en una iglesia de la aldea vecina. Esta pobre gente lo había perdido todo, lloraba y se lamentaba. Un cristiano fue a verlos, escuchó sus quejas y comprendió su angustia. Luego pidió silencio y dijo: «Queridos amigos, al pasar entre ustedes oí en medio de sus quejas, las cuales comprendo, una frase de la que quisiera hablarles. Alguien dijo: -Dios nos ha abandonado. Esto no es cierto. Ustedes se equivocan. ¡La verdad es que somos nosotros quienes hemos abandonado a Dios!».

Al contarnos este episodio, cincuenta años más tarde, la señora que lo vivió cuando era joven agregó: «Es todo lo que recuerdo de las palabras de ese cristiano. Pero esta frase fue como una flecha que alcanzó mi corazón. Por encima del estruendo de las bombas, la voz de Dios se dirigía a mí, quizá por última vez. Respondí a su llamado y nunca más me aparté de él».

“Yo cantaré de tu poder, y alabaré de mañana tu misericordia; porque has sido mi amparo y refugio en el día de mi angustia” (Salmo 59:16).

“En Dios está mi roca fuerte, y mi refugio” (Salmo 62:7).

2 Reyes 2 – Romanos 8:18-27 – Salmo 66:1-7 – Proverbios 16:15-16