– ¡Resucitó! “A este Jesús resucitó Dios… nosotros somos testigos”, afirmaron Pedro y los otros apóstoles (Hechos 2:32).
Tres días después de su muerte, varias personas constataron que su tumba estaba vacía. Muchos testigos vieron y reconocieron a Jesús durante 40 días: María Magdalena y otras mujeres, los apóstoles, ¡y en una sola ocasión más de 500 personas vieron a Jesús resucitado!
– Alzado al cielo. Mientras sus discípulos lo contemplaban, “le recibió una nube que le ocultó de sus ojos. Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo” (Hechos 1:9-11).
La resurrección nos muestra quién es Jesucristo: “Este es el verdadero Dios, y la vida eterna” (1 Juan 5:20). Él es Dios, el Todopoderoso, vencedor de la muerte y autor de la vida.
Su ascensión nos muestra que un hombre resucitado, Jesús, el Hijo de Dios, está hoy en el cielo. Se halla sentado a la diestra de Dios en su trono. “Habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas” (Hebreos 1:3).
La Biblia nos dice: “Si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo” (Romanos 10:9).
Jeremías 52:17-34 – 2 Corintios 12 – Salmo 107:1-9 – Proverbios 24:1-2