La Buena Semilla: Domingo 11 Septiembre
Domingo
11
Septiembre
Donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.
Mateo 6:21
La bendición del Señor es la que enriquece.
Proverbios 10:22
¿Dónde están nuestras riquezas?

Cristianos, ¿cuál es nuestra actitud frente a la prosperidad y a las riquezas? En teoría, sabemos bien que todo lo que el mundo ofrece es efímero e inestable, pero en la práctica, ¿qué sucede? Tal vez los nuevos medios de telecomunicación y los aparatos modernos hayan influenciado nuestras vidas. Nos hemos acostumbrado a la comodidad y al confort, los cuales pueden convertirse en verdaderos obstáculos para nuestra vida espiritual.

El apóstol Pablo escribió: “A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna” (1 Timoteo 6:17-19).

La Biblia nos da ejemplos como el de Moisés: tuvo “por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios”. Por la fe vio “al Invisible” (Hebreos 11:26-27).

Hoy, “las abundantes riquezas de su gracia” nos son presentadas “en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús”, quien vino del cielo para salvarnos (Efesios 2:7). Estas riquezas nos son aseguradas, son un “tesoro en los cielos” que no se agota, “donde ladrón no llega, ni polilla destruye” (Lucas 12:33).

“Buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios” (Colosenses 3:1-3).

Jeremías 43 – 1 Corintios 16 – Salmo 105:1-6 – Proverbios 23:4-5