La Buena Semilla: Sábado 17 Junio
Sábado
17
Junio
Confía en el Señor, y haz el bien; y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad. Deléitate asimismo en el Señor, y él te concederá las peticiones de tu corazón.
Salmo 37:3-4
Son muchos los que pregonan cada cual su propia bondad; ¿mas quién hallará al hombre fiel?
Proverbios 20:6 – V. M.
El fruto del Espíritu (8)
Fidelidad o confianza

El séptimo sabor del fruto del Espíritu es la fidelidad. En la Biblia se dice varias veces que Dios es fiel (1 Corintios 1:9), es decir, veraz, que mantiene sus promesas y cumple lo que dice. Entonces podemos confiar en él y en su Palabra, y a nuestra vez, ser fieles a nuestros compromisos, a nuestra palabra, en nuestras relaciones, y fieles administradores de todo lo que Dios nos ha confiado (1 Corintios 4:2).

Esta fidelidad va de la mano de la fe, de la confianza en Dios, pues en nosotros mismos no tenemos fuerzas. Además, la palabra traducida en estos versículos por “fidelidad” contiene ambos pensamientos: fidelidad y fe. Como Dios es fiel, podemos confiar en él, tener fe en él, y esta confianza nos da la fuerza para ser fieles.

En ciertos casos la fidelidad podría no ser buena. Como cristianos debemos preguntarnos: lo que creemos que es la fidelidad, ¿es el fruto del Espíritu? ¿O acaso es un simple apego a nuestra educación, a las tradiciones, a las reglas sociales, al miedo a los demás, a las amistades a veces insanas?

¡Nuestra fidelidad debe ser a Jesús! ¡Una confianza absoluta en su amor! Sus resultados son una buena conciencia, fuente de paz y serenidad. La fidelidad produce un testimonio, fruto del Espíritu, que muestra nuestros vínculos de comunión con el Salvador.

(continuará el sábado próximo)

2 Reyes 17:24-41 – Efesios 5 – Salmo 71:19-24 – Proverbios 17:15-16