La Buena Semilla: Miércoles 23 Julio
Miércoles
23
Julio
En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él.
1 Juan 4:9
Si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres… y no tengo amor, de nada me sirve.
1 Corintios 13:3
La primacía del amor
Testimonio

«Después de mi conversión a Jesucristo, empecé a enfocarme en las obras. Quería ser un «super cristiano». Ayunaba varios días seguidos, pasaba horas orando, me ocupaba de los desamparados… ¡La gente estaba impresionada! Yo hacía cosas buenas, pero no por buenas razones. Además, esperaba que los demás hicieran tantos sacrificios como yo… Si no lo hacían, los criticaba.

Era como si quisiera pagarle a Jesús, quien había borrado la deuda de mis pecados. Pero por más esfuerzos que hiciera para orar y servir, para mí nunca era suficiente.

Cierto día leí en la Biblia: “En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros” (1 Juan 4:10). De repente comprendí: todo lo que Dios me pide es que crea en su amor y que lo ame a cambio. ¡Esto me impactó mucho!

Empecé a ver de forma diferente mi vida de fe, a saborear la comunión con Dios, en lugar de sentir que siempre tenía que demostrar algo. Como resultado, pude mostrar más compasión a los demás y dejé de criticarlos.

Ser generoso, leer la Biblia, hacer buenas obras, orar a Dios, todo esto es bueno siempre que lo hagamos con un espíritu de gratitud a Dios. El amor de Dios y la inmensidad de su gracia nos impulsan a servirle y a buscar las cosas que le agradan».

J. W. (adaptado)

1 Crónicas 5 – Lucas 9:1-20 – Salmo 87 – Proverbios 20:1