¡Estamos ansiosos! Por un lado, nos agrada que termine el 2022, año en el que el mundo se hundió todavía más en la inestabilidad, el terror y la injusticia. Por otro lado, no sabemos qué nos reserva el 2023.

En esta época tormentosa queremos mostrarle una luz que ilumina la noche, un faro sólido en la tempestad. Proclamamos que Cristo es la Roca de nuestra vida; él produce en nosotros el deseo y el gozo para avanzar. Nuestra esperanza, firme y segura, está en Dios, quien tiene planes de felicidad para todo el que lo acepta en su vida.

Al comenzar este nuevo año queremos hablarle de un camino que quizá no conozca, para que usted también lo tome. Este camino conduce a conocer a Dios como un Dios de reconciliación, un Dios que quiere ser un Padre lleno de bondad para usted. Este camino es Jesucristo, el Salvador, por medio del cual este comienzo de año puede ser como la promesa de un nuevo día.

Queremos hablarle de Jesucristo porque tuvimos un encuentro personal con él y comprendimos hasta qué punto puede dar una feliz perspectiva a la vida. Mientras seguimos a Cristo, decimos al lector: ¡Si se atreve a seguirlo, confiando en él, por fin podrá ver preciosos y verdaderos cambios en su vida, de los cuales nunca se arrepentirá!

“Jesús… dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí” (Juan 14:6).

“A mi siervo Caleb, por cuanto… decidió ir en pos de mí, yo le meteré en la tierra donde entró, y su descendencia la tendrá en posesión” (Números 14:24).