La Buena Semilla: Sábado 12 Septiembre
Sábado
12
Septiembre
Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás.
Mateo 4:10
Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.
1 Juan 3:8
El combate cristiano (2): el modelo perfecto

Cuando Jesús estaba en la tierra, el poder de Satanás se desencadenaba. Pero el Hijo de Dios echaba fuera los demonios.

En su condición de hombre, Jesús, después de haber ayunado cuarenta días, fue tentado por el diablo en el desierto. Pero no cedió a sus ataques frontales ni a sus insinuaciones enmascaradas. En tres ocasiones Satanás lo incitó a desobedecer a Dios, pero Jesús respondió mediante la Palabra de Dios, diciendo: “Escrito está”. No solo las trampas del diablo quedaron desbaratadas, sino que él mismo se retiró cuando Jesús le dijo con autoridad: “Vete, Satanás”.

Este es un ejemplo para nosotros. Jesús obtuvo la victoria sobre Satanás mediante su obediencia a la Palabra de Dios. Nos maravillamos ante la sabiduría y el discernimiento de Jesús para anular, bajo todas sus formas, este poder de maldad. Nosotros solo podemos ser fuertes mediante el poder del Señor, al colocarnos bajo su protección. Como él, debemos utilizar la Palabra de Dios citándola con propiedad, por medio del Espíritu, en sumisión al Señor. Satanás huye ante la presencia y la autoridad del Señor. Estamos del lado del vencedor cuando estamos en comunión con él. El cristiano no debe ignorar ese poder del diablo en el mundo; puede verlo en acción en todas partes, desde el momento en que hay confusión, desánimo, conflicto, pecado… Pero el origen de estas cosas está simplemente en el corazón humano (Marcos 7:21-23), pues el creyente tiene además otro adversario, un enemigo interior, animado por Satanás, y por lo tanto otro combate que enfrentar.

(continuará el próximo sábado)

Jeremías 44 – 2 Corintios 1 – Salmo 105:7-15 – Proverbios 23:6-8