La Buena Semilla: Miércoles 19 Febrero
Miércoles
19
Febrero
Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre.
Mateo 5:15-16
No esconda la luz

Gary se fue solo a una gruta para explorarla. Cuando quiso cambiar la pila de su linterna frontal, volcó accidentalmente la caja de las pilas. Sumergido en una oscuridad absoluta, sintió el sudor rodar por su frente. Lentamente deslizó sus dedos por el suelo buscando una pila de cambio. Para su gran alivio, halló una que no había rodado al lago subterráneo junto al que se encontraba. Gary la puso en la lámpara y alumbró. ¡En un instante, la gruta oscura y espantosa se llenó de luz!

Cada vez que Gary cuenta este incidente, su voz refleja el miedo que lo invadió cuando estaba sumergido en esas tinieblas.

Quizá, como Gary, usted se siente en la oscuridad. Todo le parece tenebroso y lleno de obstáculos. Oiga las palabras de Jesús: “El que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida” (Juan 8:12). Si creemos en Jesús, él llena nuestra vida con la luz de su amor.

Cristianos, se nos insta a no poner esta luz “bajo el almud” (o debajo de un recipiente), es decir, a no esconderla. Quizás alguien a nuestro alrededor anhele encontrar una luz que ilumine su vida y le dé sentido. Cada uno de nosotros puede ser portador de esa luz del Evangelio y reflejarla a través de su vida, de su actitud, o hablando de lo que Jesús hizo por él. “Erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz” (Efesios 5:8).

Éxodo 3 – Hechos 4 – Salmo 24:7-10 – Proverbios 10:5-6